viernes, 12 de septiembre de 2014

Mandalas

Hola a todos de nuevo. Hace bastante tiempo que no os cuento nada en el blog, aunque no he dejado de pasar por aquí, intentando resolver algunas de vuestras dudas, y viendo los trabajos que me habéis comentado que estáis comenzando e incluso viendo las fotos que generosamente publicáis en el muro de Facebook. Me encanta que lo hagáis, y que poco a poco se vaya convirtiendo en un lugar de intercambio de fotografías, comentarios y dudas que vayan surgiendo, así como que cuando yo no tengo la respuesta correcta, sea alguno de vosotros el que aporte su saber para ayudarnos unos a otros en nuestras labores.
Este ha sido un laaaargo verano, han pasado muchas cosas, unas mejores, otras peores.... Las cosas malas no las voy a contar, es mejor ir olvidándolas. Las buenas intentaré ir contándooslas poco a poco.
Para empezar, os quiero mostrar el regalo que le he hecho a mi hermana a cambio de su inestimable ayuda con el cojín redondo perfecto que me cosió, sin el cual, mi cojín vintage azul de ganchillo, hubiera sido inservible.
Se trata de unos mandalas. Hace tiempo me dijo que le haría mucha ilusión tener algunos para colgar en el patio tan precioso y bien cuidado que tiene, pero yo lo había ido dejando pasar, entre el trabajo, los niños, las actividades extraescolares, mis propias labores..... en fin, el día a día. Pero uno de estos días de caluroso verano me decidí a tejérselos.
Busqué los patrones más bonitos que pude encontrar en internet, y con las lanas nuevas que tenía reservadas para alguna ocasión especial, comencé a tejer y tejer....
 
 
 
Mirad cómo me han quedado, espero que os gusten... Debajo de cada uno os dejo el enlace del que los cojí, por si os animáis a hacer alguno de ellos. Lo bueno de los mandalas es que cada uno es único porque las combinaciones de colores pueden ser infinitas.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Los tres primeros fueron creados especialmente para Yarndale. Tienen los tres una medida similar, y el último es un poco más grande, mirad...
 

 
¿Apreciáis la diferencia en el tamaño? Me gustan así, porque no son cuatro círculos exactamente iguales, sino que ese un poco mayor rompe la simetría y seguro que hace que el resultado final sea mejor una vez puestos en su sitio.
Os dejo alguna foto más porque me gustan, y porque la finalidad de los mandalas no es otra que mirarlos, disfrutar con sus colores, volverlos a mirar desde otro ángulo.... jugar al fin y al cabo.
 
 
 
 
 
 

Espero que os haya gustado verlos tanto como a mí tejerlos. Pronto os contaré más cosas sobre las vacaciones y sobre nuevos proyectos.

11 comentarios:

  1. Gracias Eva. Son preciosos de verdad. Tanto que me gustaria utilizarlos para algo más provechoso que estar colgados en la pared. Me los imagino decorando una mochila o bolso de tela vaquera, de momento le doy vueltas a algunos proyectos. En cuanto me ponga manos a la obra te lo enseñaré. ;)

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    1. Gracias a ti! Puedes hacer con ellos lo que te parezca mejor pero eso sí, luego nos los enseñas!! ;-)

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  2. que bonitas !!! me las punto para cuando termine mi manta de flores!!! estoy enganchadisima !!

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    1. Siiiii! Como contando puntos te quitas de la cabeza otros problemas va saliendo casi sin darte cuenta, y te engancha. Ánimo!!

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  3. Qur colores mas alegres.
    Seguro que le encantan

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  4. Qué bonitos Eva, manos de artista es lo que tienes. Besos

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  5. Me encanta el colorido de los mandalas. Podrías hacer un cojín mandala, seguro que quedaría precioso.

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  6. ¡Qué maravilla! No me canso de mirarlos, me encanta la combinación de colores, son preciosos...

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